Si se compara con la tradicional colocación de implantes, la cirugía guiada por ordenador ofrece una serie de beneficios.
Es más precisa
Con este tipo de cirugía, se planifica y simula la intervención previamente de manera virtual, por lo que los resultados son mucho más predecibles.
Requiere una menor incisión
Al permitir una mejor precisión y predictibilidad, evita tener que descubrir el hueso para poder colocar el implante.
Mejora el postoperatorio
Dado que la herida que se realiza en la encía del paciente es menor, en la mayoría de los casos también se evita tener que dar puntos de sutura.
Esto hace que disminuya la inflamación, el riesgo de infección y, por supuesto, el dolor.
Reduce el tiempo
La cirugía guiada disminuye el tiempo de la intervención hasta en un 70%.
Esto se debe a que, con la ayuda del ordenador, el implantólogo no tiene que prestar tanto detalle a la posición del implante o a las estructuras anatómicas con las que se encuentra, como son el seno maxilar o el nervio dentario inferior.
Además, esta técnica se suele combinar con la carga inmediata.
A través de este proceso, el paciente puede recuperar todos sus dientes en un solo día, realizando la cirugía y colocándole la corona provisional en cuestión de horas.